Cuadro de texto:  

 

CALENDARIO AZTECA

 

PIEDRA DEL SOL

 

REPRESENTACIONES SIMBÓLICAS (SEMIÓTICA) E INTERPRETACIONES SOCIOCULTURALES (HERMENÉUTICA)

 

 INFORME PRELIMINAR DE INVESTIGACIÓN

SALÓN 701 – SEXTO SEMESTRE – COMUNICACIÓN INTERCULTURAL

 

TÍTULO: El calendario azteca o piedra del Sol, en el contexto sociocultural y del medio ambiente del Altiplano de México, desde la perspectiva del conocimientos y de las prácticas culturales, sociales y económicas de las comunidades en las que están insertos los estudiantes de comunicación intercultural, séptimo semestre, 701, de la UIEM, en el marco del año 2007.

 

TEMA: Representaciones simbólicas e interpretaciones socioculturales

 

INTRODUCCIÓN y Marco teórico:

 

La “Piedra del Sol” o Calendario Azteca, en la cultura popular como en la industria cultural y del turismo del contexto actual del Altiplano de México, es reconocido como un símbolo paradigmático, tanto en el ámbito de la cultura popular como en la cultura oficial. Los aficionados de la cultura del horóscopo, como los estudiosos y estudiantes de las ciencias sociales en el mundo de México, reproducen la información y conocimiento que proviene de los primeros relatos interpretativos que se emiten desde fines del siglo XIX. En 1790, mientras se realizaban trabajos de excavación y de empedrado en la Plaza Principal de la ciudad de México, fue “descubierto” el Calendario. Se traslada al cementerio de la catedral y, en 1791, queda empotrado en una de las torres de la misma.

 

 En 1792, Antonio León y Gama, escribe una breve descripción histórica de “dos piedras”. El 05 de mayo de 1803, Alejandro de Humboldt, describe “Pocas naciones han movido masas mayores que los mexicanos”. Mathieu de Fossey, viajero francés interpreta en “Viaje a México” (1844) que el Calendario era el monumento histórico más importante, antes de la destrucción de Tenochtitlan: “Cuando se tienen las claves de todos los signos representados en círculos concéntricos en aquella piedra, se asombra uno al ver la precisión de las observaciones y la exactitud de los cálculos astronómicos de unos pueblos que, bajo muchos aspectos, estaban aún en pañales en cuanto a civilización”. El racismo y el europeísmo resaltan en las palabras de Fossey; por cierto, para deleite de los miembros de la cultura oficial o “alta” cultura del Estado Federal de México.

 

El británico Robert Burford y el alemán C. Becher en la década de 1830 opinan que la gran piedra representa el calendario de los mexicanos y que sus jeroglíficos no habían sido descifrados por los europeos y que no se entendía en el mundo occidental. Entre 1847 y 1848, soldados invasores estadounidenses practicaban “tiro” con el Calendario.  En 1885, el régimen de Porfirio Díaz, en un marco internacional en que las potencias centrales europeas, desde una perspectiva colonial e imperialista, empiezan a desarrollar políticas y actividades para establecer museos vivientes y museos de objetos exóticos de los “salvajes” y/o primitivos, recupera el Calendario que se encontraba formando parte de un muro contiguo de la Catedral católica. Luego fue introducido en el Museo Nacional como “monolito” exótico para la curiosidad del turista extranjero.

 

En el contexto cultural del mundo intelectual de la ciudad de México, año 1885, prevalecía el paradigma cristiano católico para percibir y apreciar el mundo, no solo de la Tierra, sino también, del mundo mexicano. Serpientes, lagartos, lagartijas, caimanes, perros, monos, eran animales despreciados en el imaginario social del establishment cultural, social, económico y político. La cultura oficial, impregnada de monogenismo y de positivismo, era una barrera epistemológica para aceptar la información y el conocimiento de la cultura popular. A finales del siglo XIX, los primeros investigadores sistemáticos sobre el mundo de los aztecas, o de las culturas prehispánicas que se desarrollaron en el Altiplano mexicano, fueron Lewis Henry Morgan (1818 – 1881) y Adolf Francis Alphonse Bandelier (1840 – 1914), ambos estadounidenses.

 

Morgan y Bandelier, a finales del siglo XIX se interesaron por la “ruedas de los calendarios mexicanos”. En 1975, Alfredo Clavero publica “Calendario Azteca”. Estudio antropológico; Bendelier compra una copia, a través del mexicano Joaquín García Icazbalceta. En 1964, el Calendario fue trasladado desde el antiguo Museo Nacional al actual Museo Nacional de Antropología. El historiador mexicano José Luís Juárez López reflexiona respecto del Calendario y su protección en el antiguo Museo Nacional (2004): “¿Se le puso en el museo para protegerlo y para que formara parte de una colección prehispánica y así presentar a México como un pueblo protector del indigenismo exótico? No olvidemos, incluso, que justo después de meter el Calendario Azteca al Museo Nacional, la ciudad de México se engalanó con monumentos y paseos. Y entre ellos surgió otro símbolo indígena, el Monumento de Cuauhtémoc, en pleno paseo de la Reforma. Éste se convirtió de inmediato en pieza favorita de los porfiristas y, además, su interpretación era más fácil que la del antiguo calendario”.

 

¿No es fácil la interpretación del antiguo Calendario Azteca? José Luís Juárez López continúa reflexionando en el 2004: “Estudiar el Calendario Azteca como un fenómeno cultural, social e incluso artístico, complementaría los estudios que ya se han hecho en torno a su contenido y descripción; pero creemos que también es preciso apuntar que su estancia en el Museo Nacional de Antropología es de apenas 40 años y que el periodo que pasó a lado de la Catedral fue el más largo y, por lo tanto, debe ser analizado como parte sustancial de la historia de la ciudad de México e incluso del país en el siglo XIX”. Las descripciones que diversos investigadores realizaron al Calendario Azteca fueron y son realizadas desde la perspectiva del horóscopo grecolatino y de la cosmovisión judeocristiana.

 

Por ejemplo, Krystyna Magdalena Libura, en “Los días y los dioses del Códice Borgía” (2000) manifiesta respecto de quiénes y cuándo se leían: “Las imágenes del códice nos impactan, aunque nos parezcan incomprensible y extrañas. Interpretarlas fue siempre un arte sólo reservado a algunos sacerdotes preparados para eso, a quienes se conocía como tonalpouhque que podríamos traducir como ‘los que llevan la cuenta de los días’, o aun mejor, ‘lectores del destino’. Ellos consultaban los tonalamatl para saber qué días eran convenientes para los viajes de los mercaderes, para la guerra, y sobre todo para pronosticar el destino de los recién nacidos. El día del nacimiento era tan importante que los niños llevaban como propio el nombre de éste, (…). Sin embargo, el más afortunado pronóstico podía no cumplirse si el ser humano no colaboraba con los dioses; asimismo, aunque alguien hubiera nacido en un día desfavorable, podía mejorar su futuro gracias a su empeño”. Prevalece en esta interpretación el imaginario de los “profesionales” del horóscopo. De acuerdo con este imaginario, los niños de Tenochtitlan se habrían llamado, por ejemplo: “caimán” (Ehecatl), “casa” (Calli), “lagartija” (Cuetzpallin), “muerte” (Miquiztli).

 

En el relato científico de arqueólogos, por ejemplo, Laurette Séjourné (1911 – 2003), arqueóloga y etnóloga, quien a mediados del siglo XX trabajó en el Instituto Nacional de Antropología e Historia, prevalece la perspectiva cristiana en la interpretación del Calendario Azteca. En el libro “El Pensamiento Náhuatl Cifrado por los Calendario” (1981) argumenta: “Estos nombres de los 20 días se suceden sin interrupción, pero sin relación con ningún fenómeno natural, como lo hacen nuestros días (Calendario gregoriano cristiano) con los meses. (…). Este paralelismo se termina, no obstante, en un punto esencial; mientras que la suma de nuestros días no interviene en los cálculos que corresponden a las posiciones solares; los 20 días acumulan  un total de 260 formando un calendario autónomo, un calendario sin correspondencia con el mundo físico pero regido por normas tan rigurosas como las de los cuerpos celestes, hasta el punto que su movimiento circular llega a integrarse a los componentes cósmicos hasta moverse sobre la misma órbita”. Este argumento es una hipótesis muy próxima al imaginario del mercado consumidor de los lectores  del horóscopo.

 

Por otra parte George C. Vaillant (1901 – 1935) estadounidense y curador honorario de arqueología mexicana en el Museo Norteamericano de Historia Natural y, profesor honorario del Museo Nacional de Antropología de México, en su obra “La Civilización Azteca” (edición 2003) conjetura: “Los aztecas creían que habían pasado por cuatro o cinco edades, o Soles. Difieren los detalles; pero el testimonio tallado en la gran Piedra del Calendario azteca puede considerarse como la versión oficial de Tenochtitlan. La primera edad, Cuatro Océlotl, tenía a Tezcatlipoca como dios reinante quien, al final se transformó en el Sol, en tanto que los jaguares se comían  a los hombres y a los gigantes que en aquel entonces poblaban la Tierra. Quetzalcóatl era el gobernante divino de la segunda Era, Cuatro Viento, a la expiración de la cual los huracanes destruyeron el mundo y los hombres se transformaron en monos”.

 

“El Dios de la Lluvia, Tlaloc, dio luz al mundo en la tercera época, Cuatro lluvia, que terminó por una lluvia de fuego. Chalchiuhtlicue, ‘Nuestra Señora de la Falda de Turquesa’, era una Diosa del Agua, que presidió con aptitud durante el cuarto Sol, Cuatro Agua, en el que tuvo una inundación que transformó a los hombres en peces. Nuestra Era presente, Cuatro Terremoto, está bajo dominio del Dios Sol, Tonatiuh, y será destruida a su tiempo por terremotos.”

 

“Si bien es cierto que las versiones según los lugares, parece existir una recapitulación de los grandes cataclismos producidos por inundaciones, erupciones volcánicas, huracanes y terremotos que acosaban a las comunidades de México antiguo. También hay un reflejo del orden en que los dioses alcanzaron prominencia en el culto local. En la historia de los mexicanos hay referencias a luchas dentro de la misma ciudad, entre los devotos de dos cultos para resolver la supremacía.”

 

El Universo mismo se concebía con un sentido religioso más bien que geográfico y se dividía horizontal y verticalmente en zonas de significación religiosa. El universo horizontal, quizá la concepción más antigua, reconocía cinco direcciones, los cuatro puntos cardinales y el centro. El Dios del Fuego, antiguo y fundamental en la religión mexicana, gobernaba la zona central. El Oriente estaba designado al Dios de la Lluvia, Tlaloc, y a Mixcóatl (Serpiente de nube), Dios de las Nubes, y era la región de la abundancia. En esta concepción, la geografía se combinaba con el rito, ya que la fertilísima llanura costeña de Veracruz es la fuente verdadera de la lluvias de estación, motivada por la condensación del aire caliente, cuando el Golfo de México queda expuesto a lo fríos vientos de la Altiplanicie central.”

 

“El sur se considera maligno, quizás a causa de la áridas regiones situadas al Sur de Morelos y de Puebla; pero tenía como deidades, dioses asociados con la primavera y con las flores, Xipe (El Desollado) y Macuilxóchil (Cinco Flor). El occidente que era la morada del planeta Venus, la Estrella de la Tarde, tenía, sin embargo, una significación favorable que se asociaba y se identificaba con Quetzalcólatl (Serpiente Emplumada), el Dios de la Sabiduría. El norte era una región sombría y terrible, gobernada por Micltantecuhtli (Dios de la Muerte), quien (y esta es una de las contradicciones tan frecuentes en la teología mexicana) estaba relacionado, a veces, con el sur.”

 

“El mundo vertical estaba dividido en paraísos e infiernos que no tenían significación moral, sino que eran simplemente mundos superiores e inferiores. El número de los paraísos variaba hasta trece y representaba la morada de los dioses, según su rango en la jerarquía, en el paraíso superior vivía el creador original y hacia abajo hasta el fin de la escala. Uno de estos paraísos correspondía a Tlaloc, quien recibía a los que morían ahogados, o por otras causas relacionadas con el agua, o fulminados por el rayo. Una escuela de pensamiento dividía los paraísos en oriental y occidental, conforme al paso del Sol. El oriental era el hogar de los guerreros, cuya muerte en la batallas o en el sacrificio nutría al Sol, y el occidental era el hogar de la mujeres que morían en el parto, sacrificándose a dar luz futuros guerreros.”

 

Los demás muertos iban al Mictlan, o mundo inferior. Tenían que vencer varios peligros antes de que pudieran continuar su vida allí, de tal manera que iban provistos de amuletos y obsequios para el viaje que duraba el sagrado número de cuatro días: El caminante tenía que ir entre dos montañas que amenazaban con aplastarlo, escapar primero de una serpiente, después de un cocodrilo monstruoso; cruzar 8 desiertos; subir 8 colinas, y soportar un viento helado que le arrojaba piedras y cuchillos de obsidiana. Después llegaba a un ancho río que cruzaba montado en un pequeño perro rojo, el que a veces se incluía en la tumba, junto con los demás objetos funerarios, para este objeto. Finalmente, al llegar a su destino, el viajero ofrecía obsequios al señor de los Muertos, quien lo enviaba a una de nueve diferentes regiones. Algunas versiones hacían que el muerto permaneciera durante un periodo de prueba  de cuatro años en los nueve infiernos, antes de que continuara su vida en el Mictlan, cosa que, como el Hades griego, carecía de significación moral.”

 

“Como hemos dicho, los aztecas concebían su Universo con extendido horizontalmente hacia fuera y verticalmente hacia arriba y hacia abajo. El mundo dividido horizontalmente significaba la asociación de los poderes divinos con los fenómenos de la geografía y del clima. Este significado de la dirección es un concepto religioso habitual. El ordenamiento vertical de los paraísos tiene más bien que ver con el rango y el orden que con los fenómenos naturales. La jerarquía de los santos cristianos, con su reconocimiento implícito de posición y autoridad, se asemeja grandemente al concepto azteca de sus dioses. El culto azteca y el ritual cristiano tienen en gran parte la misma actitud hacia las distinciones entre filosofía y práctica y entre el punto de vista del teólogo erudito y el de los adoradores humildes.”

 

Los “trece paraísos” (días) de la supuesta cosmovisión del mundo de los habitantes del Altiplano mexicano, se asemejan a los siete círculos (días) de la “Divina Comedia” de Dante Alighieri o de los “doce dioses” del Olimpo de la mitología griega. El viaje al mundo de los muertos, Mitlan, duraba el “sagrado número de cuatro días”. ¿Existía la palabra sagrado en el idioma Nahatl? Atravesar “un ancho río que cruzaba montado en un pequeño perro rojo” se asemeja al relato de Alighieri cuando “llegados al río Aqueronte  lo atraviesan en la barca de Carón”. Sin duda, los estudiosos del Calendario se dejaron llevar por el imaginario grecorromano y judeocristiano, meta relatos aún vigentes en el establishment cultural de México y del mundo occidental europeo.

 

No relacionar los veinte símbolos del tercer círculo o anillo circular con los fenómenos de la naturaleza del Altiplano de México y alrededores, sobre todo con la geografía de los cuatro puntos cardinales de la Antigua ciudad de Tenochtitlan, conlleva a construir relatos que no tienen ninguna relación con el mundo mesoamericano. Todo pueblo o cultura que deja formidables testimonios de información y conocimiento, como el mundo azteca, antes de arribar al estadio donde prevalezca la producción cultural abstracta, la producción cultural tiene relación con la naturaleza. Además, toda producción concreta, como lo es el Calendario Azteca, es resultado de la dialéctica entre la realidad concreta y el conocimiento del México Antiguo. ¿Moctezuma, la “Mujer Serpiente” y sus consejeros esperaban un Quetzalcóatl blanco? Es una pregunta hipótesis que lo dejamos para un estudio posterior.

 

La postura  de la asignatura Representaciones Simbólicas (semiótica)

 

En los grupos del sexto semestre (2007), mediante una convención establecida entre el profesor y los estudiantes se decidió estudiar los veinte símbolos o formaciones simbólicas del tercer anillo o círculo del Calendario Azteca. Desde la perspectiva semiótica se indagó a quién o a qué algo representa cada uno veinte símbolos que, en la mayor parte de la literatura existente indican que representan a los días, sin relación con ningún fenómeno de la naturaleza mesoamericana, concretamente del Altiplano de México. Dado que la mayoría de los estudiantes de los salones 601 y 602 son miembros de unidades productivas familiares, relacionadas con la agricultura y la crianza de animales domésticos para consumo interno, en los distritos aledaños a la UIEM, se decidió analizar, en primer lugar, los cuatro fenómenos astronómicos del hemisferio norte de nuestro planeta.  Quedó establecido que en la cultura popular del Altiplano de México, el equinoccio de primavera (21 de marzo), solsticio de verano (21 de junio), equinoccio de otoño (21 de septiembre) y el solsticio de invierno (21 de diciembre) son notables y omnipresentes, en las prácticas culturales, sociales y económicas.

 

El 21 de marzo, el contexto tiene relación con  el símbolo representado por el caimán o lagarto, cipactli, que significa a la producción de la tierra, a la fecundidad de la tierra y al reptil que goza de los primeros calores al “salir” de la tierra; es el periodo de la siembra de la semilla. Luego de este equinoccio de primavera los días se alargan y las noches se acortan y, por lo tanto, es el comienzo del año agrícola, en la que tienen preponderancia simbólica y económica el maíz y el maguey.

 

El 21 de junio, el contexto está relacionado con el símbolo representado por la serpiente, coatl, que significa el inicio del verano, de la abundancia del agua, del desarrollo de los cultivos y de toda especie animal. En el  verano del Altiplano abundan las víboras de agua (color verde); las serpientes cambian de piel para adecuarse al color de la vegetación del verano. En este solsticio de verano concluye el alargamiento del día y la reducción de la noche. Comienza el periodo en que los días se achican y las noches se alargan.

 

El 21 de septiembre, el contexto está relacionado con el símbolo representado por el mono, ozomantli, que significa el comienzo del otoño y la abundancia de frutos de los reinos animal y vegetal. En el Oriente del Altiplano de México, hay abundancia y una de las especies beneficiadas en el ozomantli o mono, que se alimenta de vegetales y animales pequeños. Luego de este equinoccio de otoño los días comienzan a achicarse y los noches a alargarse.

 

El 21 de diciembre, el entorno está relacionado con el solsticio de invierno, representado simbólicamente por el  buitre, cozacacuacuhtli, que significa el comienzo del invierno. En el Altiplano de México las milpas quedaron limpias, los animales menores no tienen alimentos y los medianos herbívoros padecen la escasez de alimentos, convirtiéndose en presa del buitre, ave carroñera por antonomasia

 

Luego del análisis de las cuatro estaciones, clásicas del hemisferio norte, en el contexto de la geografía del Altiplano de México, previo acuerdo entre profesor y alumnos, se decidió analizar cada uno de los veinte signos como si fueran meses. Para ello, se dividió los 365 días por 20, obteniendo como resultado un mes de 18 días.

 

Luego, los estudiantes de los salones 601 y 602, a modo de examen escribieron un ensayo interpretando semióticamente el significado de los veinte símbolos del Calendario Azteca, desde la perspectiva de sus respectivos ámbitos culturales y familiares. Es decir se analizó cada símbolo desde la perspectiva de la experiencia y conocimiento de cada mundo familiar, en el contexto del Altiplano mexicano. El resultado fue notable desde lo ontológico, epistemológico y metodológico. Los estudiantes tienen relaciones genealógicas con los mazahuas, otomíes, tlahuicas y nahuátl, quienes desde antes de 1519 y hasta el presente, siempre fueron sujetos activos de la historia, de la economía, cultura y de la sociedad diversa mexicana.

 

Durante la estación del invierno, que está representado por los símbolos Buitre (Cozacacuacuhtli), Movimiento (Hollín),  Cuchillo (Tecpaltl), y Lluvia (Quiahuitl) (mediados de diciembre, enero y febrero del calendario gregoriano cristiano), es el periodo tradicional en que se “corta o capa” el maguey para la extracción de agua miel, para la producción del pulque; la cadena productiva del agua miel y del pulque, tradicionalmente, dura un periodo que abarca desde el mes Hollín hasta el mes Conejo, Tochtli (enero – agosto). Este periodo es importante, por cuanto está significado por un pedernal o cuchillo; las principales actividades que caracterizan este periodo son: cortar o “capar” el corazón o quiote del maguey, para la extracción del agua miel (alimento de niños y madres y periodo de lactancia y, bebida medicinal); elaboración del pulque (bebida de un capital simbólico predominante en la cultura  y prácticas sociales), recuperación de la fibra del maguey hilado; además, en el corte de cañas, faenas del venado, caza, etc., siempre, está presente el cuchillo.

 

Según la historia oficial, el pedernal o cuchillo, simboliza el instrumento para el sacrificio de los “guerreros vencidos para ofrendar a los dioses”. El término “dios” está presente en la mayoría de la literatura relacionada con el mundo de la ciudad de Tenochtitlan y la Confederación Azteca, en el ámbito del Altiplano mexicano. Los estudiantes del salón 701 y el profesor visitaron el Museo Nacional de Antropología e Historia, especialmente el pabellón Mexica. Las representaciones o formaciones simbólicas (testimonios materiales y textos), conjeturan que en la cultura y prácticas sociales de los aztecas prevalecía “los sacrificios humanos”. Cualquier persona descendiente de los pueblos nahuatl, otomí, mazahua, maya, etc., que visite el pabellón Mexica, egresa del mismo, desubicado, confundido y con la sensación de ser “culpable de hechos aberrantes”. En ningún lugar del Museo se encuentra un texto que haga explícita la invasión de Tenochitlan por los españoles genocidas, como tampoco, sobre su destrucción sistemática de la representaciones simbólicas, ocurrida desde  el 18 de noviembre de 1519, antes del 13 de agosto de 1521 y posteriormente, hasta finalizar la despótica colonización e imperialismo hispano (1810).

 

CODIFICACIÓN E INTERPRETACIÓN

 

Datos empíricos de la Naturaleza en relación al Calendario Azteca, descriptas por los estudiantes del sexto semestre (2007).

 

CAIMÁN O LAGARTO (CIPACTLI): 21 de marzo – 07 de abril

 

En mi comunidad,  esta temporada es dedicada a la siembra; cae la primera lluvia. Las plantas frutales empiezan a florear. La gente lleva su semilla a la misa para bendecirla y posteriormente sembrarlo (Carmen Reyes Sánchez: CRS).

 

En esta región no existe el caimán, pero sí el camaleón que se lo conoce como el rey de los reptiles; su sangre es usada para aliviar los males de espanto; la sangre se bebe o se unta sobre el cuerpo. Atrapar un camaleón es muy difícil ya que es muy competente para camuflaje; durante la temporada seca es irreconocible porque se confunde con la maleza y la hojarasca. La gente mayor respeta al camaleón y no lo toca; sin embargo, los niños suelen tomarlo, voltearlo de panza y acariciarlo; al poco tiempo se queda dormido.

 

Los camaleones andan mucho durante la canícula, época en que hace mucho calor; los animales rastreros son más ponzoñosos. En esta época, alrededor del Sol se puede observar un gran círculo naranja – blanco – azul, poco común en los otros días del año (Vianey Florentino Pérez: VFP).

 

En este periodo, la gente comienza a cultivar maíz, luego de la primera lluvia; los agricultores se guían por el canto de los pájaros, por el color verde que adquieren los árboles, por las corrientes de aire que forman pequeña nubes (Alberto Cayetano Marcos: ACM).

 

La primera lluvia indica que la tierra está lista para cuidar la semilla durante quince días. En otras referencias se menciona que Cipactli es el representante de nuestro sustento, que significa la siembra para consumo humano; se cultiva maíz junto al frijol, haba, chicharro. Se dice que como seres pensantes, debemos producir nuestro propio alimento (Gloria Segundo Andrade: GSA).

 

 

VIENTO (EHECATL): 08 de abril – 25 de abril

 

Efectivamente, en este mes corre mucho aire y, también se continúa sembrando maíz en las milpas hasta mediados de abril. Es la época del nopal, debido a que es una planta que no requiere de agua y puede soportar diferentes climas. Además es época para cazar conejo (CRS).

 

Es época de mucho viento durante el cambio de estación. Hay un dicho que expresa “febrero loco y marzo otro poco”. Durante estos días corren fuertes ventiscas que hasta  arranca techos de casas y se lleva por los aires. Igualmente, es época de remolinos; la gente mayor recomienda evitar quedar atrapada en un remolino porque “allí está el diablo” (VFP).

 

Es el mes de la serpiente emplumada, es la unión de dos casas que forman una sola. Si la tierra ayuda a la semilla a germinar, origina un producto nuevo que es el sustento. La gente continúa sembrando maíz; algunas personas concurren a misa con una canasta de maíz seleccionado para la siembra; se lo hace bendecir (GSA).

 

Este mes continúa siendo apto para la siembra de maíz. Con la ayuda de viento pueden trabajar sin el calor sofocante a pleno Sol. Por la mañana y la tarde sopla un viento fresco (Liliana Sánchez Sánchez: LSS).

 

CASA (CALLI): 26 de abril – 13 de mayo

 

Corazón de la montaña. En este mes se guarda todo lo que es forraje. En mi comunidad se ponen a sembrar  donde el maíz no salió. En esta época, el calor se intensifica y se mueren los animales, el burro, ovino, y bovino, debido a las altas temperaturas y, porque no tienen nada que comer. También se trasquilan los borregos porque ayuda el calor intenso. Además, en esta época hay muchas víboras; por el calor y el cambio de ambiente cambian de piel. Hay plantas silvestres como la jara que florea en esta época; su presencia se destaca a larga distancia por la flor amarilla (CRS).

 

Comienzan las primeras lluvias y, con el crecimiento de diversas hierbas y el quelite, alimento importante para la gente del Altiplano. Algunos quelites son: quintoniles, chivitas, cresones, mostazas, cenizos, mochis, sandeces, berros, sanguinarias, navos, trébol, quelitón, malva, verdolaga, ehuales y otros. Estas hierbas son comestibles para la población rural. Los animales como conejos, perros y liebres se llenan de pulgas por el calor (VFP).

 

Durante este periodo la tierra protege y cuida el maíz, que es la semilla, la tierra se convierte en casa de nuestro sustento. Actualmente, se realiza una fiesta en honor a San Isidro Labrador. Se lleva al santo a visitar las pequeñas  capillas del pueblo y al pie del cerro, donde le ofrecen una cortadera de pollos, una misa; además una carrera de caballos, para darle la gracia por la buena siembra de maíz (GSA).

 

En este mes las víboras cambian de piel. Los ancianos relacionan esta situación con la renovación de la tierra (debido a que estos animales se arrastran). Así como la víboras renuevan la piel, la tierra renueva los cultivos (siembra) (LSS).

 

LAGARTIJA (CUTZPALIN): 14 de mayo – 31 de mayo

 

En esta época se escarda el maíz que se sembró a mediados de marzo. La gente que es católica pasea la imagen de San Juanita para que bendiga el maíz. El calor se intensifica y causa enfermedades tanto en los animales como en la gente (CRS).

 

Durante estos días, las lagartijas, al ser animales que absorben  la radiación solar suelen salir de sus madrigueras con mucha frecuencia, para tomar Sol, sobre las piedras y los tejados. Popularmente se dice que cuando uno ve una lagartija tomando baño de Sol, “esta absorbiendo la sangre del quien está observando (VFP).

 

Mes en el que la g ente cambia de personalidad al igual que las serpientes cambian de piel.  Se pone abono a la planta de maíz y se escarda, para que los vientos de agosto no tiren las plantas (GSA).

 

A partir de este mes las lluvias empiezan a ser abundantes. Las víboras y, sobre todo, las lagartijas salen a la mañana a tomar Sol; es un mes en que es frecuente encontrar estos reptiles fuera de sus escondites (LSS).

 

SERPIENTE (COATL): 01 de junio – 18 de junio

 

Época en que las víboras de agua se aparean y salen de sus casas, porque sus casas se la lleva el agua de lluvia. Los frutos de las plantas están madurando. La gente que sembró el maíz a mediado de abril, escarda la planta y se segundea para que terminen todos los trabajos del campo (CRS).

 

Serpiente, kimi en mazahua. Desde principios de junio hasta mediados de julio, las serpientes cambian de piel, dejando el tono café oscuro claro que las caracterizan durante la época seca y, que les permiten camuflarse entre la maleza y la tierra. Algo maravilloso porque al dejar el “surrón”, su piel vieja le ha permitido sobrevivir ante la amenaza de la que son víctimas. Hasta se la satanizan o se asocian con animales diabólicos. Recordemos la carga estigmatizadora que han sufrido dentro de la cultura cristiana, al representarlas como el animal que hizo “pecar a la primera pareja humana”.

 

Sin embargo, por otro lado, hay quienes usan las serpientes para aliviar males como el espanto; la cura consiste en comer carne seca y limpiarse con hierbas y ungüentos. En los países andinos sudamericanos, las serpientes están relacionadas con la  abundancia material y la prosperidad. En México, algunas personas se sientes contentas al soñar, o encontrar una serpiente, ya que la creencia popular sostiene que la fortuna toca sus puertas. Algunos confían tanto en la víbora, que suelen llevar en la bolsa del pantalón o camisa el cascabel de la serpiente, como amuleto de la abundancia (VFP).

 

Durante este mes toda la flora está verde por las lluvias; los manantiales se llenan de agua y brota el líquido vital. La serpiente representa diversas formas en que se manifiesta la energía del agua (GSA).

 

La hierba de la milpa empieza a crecer, el campesino se interna a desyerbar su cultivo. Es común encontrar víboras en los surcos, ya que es temporada de lluvias; se inundan los lugares donde viven y salen a asolearse (LSS).

 

MUERTE (MIQUIZTL): 19 de junio – 06 de julio

 

Se intensifican las lluvias y se inicia el verano. En los campos y milpas hay brote de hierbas y quelites que es una comida típica del campo. El árbol de capulín da sus frutos y en esta época y con sus frutos, se puede hacer atole de capulín y tamal de capulín (CRS).

 

Se asocia con el solsticio de verano. Para el México antiguo, el respeto a la muerte ocupaba un lugar preponderante en la cultura; tanto que no se concebía como dolor, final o pesar, sino como otro mundo, otro universo por el cual se tenía que pasar: era el Mictlan (VFP).

 

La muerte es el símbolo de la transmutación de la naturaleza. Este periodo es muy significativo porque las lluvias caen con gran intensidad y, esto, ayudará o perjudicará el cultivo; puede ocasionar que se pudra la planta de maíz debido al exceso de agua. También, algunos gusanos pueden acabar con el cultivo hasta provocar la sequía (GSA).

 

Este mes era una época en que los antiguos aztecas veneraban a los muertos. Ahora se venera desde el 31 de octubre hasta el 02 de noviembre, por la imposición del calendario gregoriano. En este mes, actualmente, los habitantes de otras comunidades y pueblos concurren al cerro de San Juan de Xalpa, para cazar conejos, ardillas y pájaros. Finaliza el periodo la extracción del agua miel y del pulque (LSS).

 

VENADO (MAZATL): 07 de julio – 24 de julio

 

Para esta temporada se hacen tamales con hojas verdes de maíz y, se empieza a comer quelites. Además, el maíz comienza a espigar. Los caracoles empiezan a multiplicarse debido a la humedad que hay en todas partes por las intensas lluvias. Hay brote de diferentes hierbas silvestres (CSR).

 

Al estar relacionado con el actual mes de julio, representa a la abundancia, a la reproducción. El venado dentro de la cosmovisión mazahua es un animal que pertenece a la región; la palabra jñatro significa “cazador de venados” (VDP).

 

En este mes, el maíz empieza a jilotear, es decir empieza a brotar lo que se  convertirá en elote (GSA).

 

Los árboles comienzan a tener flores y la fruta está madurando. En varios municipios festejan a San Juan. En la comunidad de San Juan Coajomulco festejan en grande, hay vísperas y dan mole. Se tiene la creencia que si no llueve, hay que sacar al santo a dar un paseo, para que llueva (Yesenia Esquivel Arriaga: YEA)

 

Suele cambiar repentinamente el clima, llueve con granizo, suele haber en la costa del Mar Caribe huracanes y, en el Altiplano, tormentas eléctricas. El venado comienza su periodo de copulación para la reproducción (ocho meses de preñez) y, los cuernos se desarrollan durante el verano (Gabriela Teresa Juárez  Saucedo: GTJS)

 

CONEJO (TOCHTLI): 25 de julio – 11 de agosto

 

Empieza a multiplicarse la langosta y las gallinas ciegas, que son plagas que comen los sembradillos. Comienza a brotar la flor del camotillo que se llama mirasol, que solo se da en la época de la lluvia. Además, empieza a pilotear el maíz (CRS).

 

La reproducción y sobre población están representados por el conejo. Hay abundancia de rastrojo y alimento para todos los roedores, llámese conejos, ratas, tuzas ardillas, liebres. De hecho, sino se cosecha pronto, estos animales pueden acabar con cultivos enteros (VFP).

 

El conejo es símbolo de la fecundidad en la tierra por medio de la Luna. Época en que florece la espiga del maíz y se lo protege del viento. Cuando pasa el viento y tira el maíz, la gente realiza un sahumerio con copal para bendecir la milpa y, echándole humo al maíz que crece, se cree que el maíz levantará poco a poco (GSA).

 

La gente tiene que echar abono al maíz, para que crezca y no esté amarillo. Sí salen cañas puras el agricultor perderá parte de su cosecha. Además, se empieza a comer elotes; se cocina varios platillos: gorditas de elote, esquites. En varios lugares se acostumbra a invitar a los familiares, para que corten elotes para festejar un buen año de cosecha (YEA).

 

En mi pueblo Tlalpujahua, la gente concurre al cerro de la Coló y se cortan pequeñas flores que han salido y colocan en los surcos del maíz que ya ha crecido bastante. Además, sale hongo en las mazorcas del maíz y se puede comer, pero hay que sacar al hongo apenas se encuentra en crecimiento (GSJS).

 

AGUA (ATL): 12 de agosto – 29 de agosto

 

Durante este mes las lluvias son más intensas y, la gente de mi pueblo ofrece algunas flores al maíz. Un día antes la gente busca flores silvestres y, el 14 de agosto son colocadas al elote y alrededor del terreno; ese día es fiesta ya que se prueban las primeras cañas y elotes (GSA).

 

Periodo en que termina de elotear el maíz y se da la canícula. Es el mes en que es más fuerte el calor; implica que se enfermen las personas y los animales, los más vulnerables. También, en este periodo da la flor de calabaza. Además, los animales mueren por comer un insecto verde, idéntico al color y a la forma del pasto, se confunde con la hierba (CRS)

 

En este mes llueve bastante y entra en el pasto verde la canícula; los animales que comen la canícula se abotijan y corren el peligro de morir. Se recomienda sacar a los animales al campo después de las nueve de la mañana. En este mes se celebra con una virgen el 15 de agosto; se cree que después del medio día ya se puede agarrar elotes y cañas, pues la virgen la pasean para  bendecir las milpas (YEA).

 

El agua es vida. No es de sorprender que las civilizaciones se hayan establecido al lado de un ojo de agua, río, pozo, laguna. Un ejemplo, México – Tenochtitlan, ciudad fundada sobre el enorme lago Texcoco. Es por ello, que dentro del mundo azteca existieron representaciones o símbolos que encarnan los elementos, en este caso Tlaloc.

Agua y lluvia, sustantivos difíciles de separar, puesto que como el agua o lluvia, son generadores de vida, purificación y limpieza. En este periodo, las lluvias están en pleno apogeo, lo cual permite el crecimiento de cultivos y frutos silvestres. El agua provee el alimento, el maíz y la tortilla, el fruto de la tierra. Algo extraordinario es el brote de hongos del monte: las pancitas, patitas de pájaro, chinicuas, venaditos, patas de coyote, moquitos de güila, orejas de ratón, pollas, queta, tejamaniles, quisimos, duraznos, señoritas. La gran variedad hace que el quien conozca pueda  deleitar el paladar con un guiso de hongos del monte. El hongo al ser autótrofo se alimenta por si mismo y con abundante agua (VFP).

 

PERRO (ITZCUINTLI): 30 agosto – 16 de septiembre

 

Época en que los perros brillan su pelaje por consumir elotes. Es periodo de los elotes; hay mayor apareamiento por la buena alimentación. Se empieza a cortar la hierba del maíz para los animales, porque ya esta maduro (CRS).

 

Es época en la cual los elotes dan sus primeras señas de que se convertirá en maíz y, da pie a que se escojan los granos aún blandos para hacer tortillas de granos de elote (GSA).

 

En este periodo las personas salen a buscar huithacoche; éste sale en lugar de los elotes, es de color negro; la gente lo guisa. En Toluca los comerciantes lo venden a precio caro; es difícil encontrarlo. La gente lo compra porque es nutritivo y medicinal; una sola vez al año lo podemos probar (YEA).

 

El hongo del maíz se comienza a vender. En las milpas se corta el maíz que posteriormente servirá para la elaboración de las tortillas que hechas a mano (GTJS).

 

Para finales de agosto los hongos se comienzan a podrir y a desaparecer. El tiempo comienza a cambiar y el aullido del coyote o “miño” en mazahua se hace presente. Los coyotes al aullar expresan que el tiempo va a cambiar. Cuando los perros huelen el hedor el coyote, también aúllan de miedo; ya que, a pesar de que el coyote es más delgado que un perro, es un animal que infunde miedo; esto obedece a los constantes comentarios que se hace este animal, tales como:

 

“De noche se hace del tamaño de un burro”, “Se vuelve blanco en la oscuridad”, “Puede matar a un hombre tirándolo, orinándolo y mordiendo sus genitales”, “Los rifles no funciones con su presencia”. Muchas historias giran en torno al coyote, cercano familiar del perro. Desafortunadamente, desde hace mucho tiempo se le caza sin control, lo que ha provocado que la especie se encuentre en peligro de extinción. Además, la creencia, o la virtud, de que su carne es curativa, conlleva a una  situación límite su existencia (VFP).

 

MONO (OZOMAHTLI): 17 de septiembre – 04 de octubre

 

Hay equinoccio de otoño y también empieza a secarse algunas hierbas, debido a la desaparición de la lluvia. El elote está en proceso de maduración (CRS).

 

Entra la estación de otoño, comienza a caer de los árboles las hojas; nuevamente la gente se prepara para recibir el helado invierno. El mono se encuentra en reproducción para preservar la especie, favorecido por  la abundancia de frutales. El maíz se empieza a cortar y a almacenar ya que es uno de los principales alimentos del ser humano en el Altiplano mexicano (GTJS).

 

Los animales que en este mes se copulan es muy probable que dentro de unos meses tengan sus crías; además en estas fechas, los árboles aún tienen fruta y se empiezan a caer las hojas. Los quelites se están terminando; un ejemplo, son los carretones y cartillas que les van saliendo espinas y ya no se pueden comer (YEA).

 

Comienza el periodo en que las víboras cambian de piel, de verde a café o gris. El maíz se empieza a convertir en mazorca y salen los camaleones que también cambian de piel y tienen un caparazón que los cubre; se están extinguiendo por los fertilizantes que actualmente se utiliza en la agricultura (Rosa Rebeca Garduño Lorenzo: REGL).

 

HIERBA DIVINA (MALINALLI): 05 de octubre – 22 de octubre

 

La flor cempasuchitl está a punto de florear, para estar presente el día de los difuntos. Se comienzan a recoger los primeros frutos como el fríjol y  haba (GSA).

 

El campo se matiza de amarillo, color que para los aztecas denotaba enfermedad y muerte. Es en esta época que el cimpazuchitl florece, aromatiza, crece y se difumina en los campos. Por ello es usada para adornar las tumbas conmemorativas de familiares y amigos que han fallecido. El tono de esta planta define su uso, de ahí que se diga hierba divina porque se refiere al adorno de la muerte. Esta planta, actualmente, también es usada para alimentar a los pollos, ya que al consumirla, la carne de pollo adquiere una tonalidad amarilla y más apetitosa (VFP).

 

Por está época, se empieza a cosechar los cultivado, las familias que sembraron primero, haciendo intercambios de ayudas para la cosecha (CRS).

 

Existen plantas que son curativas en octubre; ya que casi no llueve, la gente se está preparando para el tiempo de secas y, tiene que buscar hierbas para curar a su gente. En esta época el escorpión cambia de color, del café y se convierte en verde. Una de las plantas que se busca en esta temporada es la ámica, ya que después ya no se distingue; también se escogen las barbas de lo elotes, para preparar té (YEA).

 

CAÑA (ACATL): 23 de octubre – 09 de noviembre

 

El carrizo es una planta semiacuática que sirve para producir fuego y significa calor o energía. En esta época el elote se convierte en maíz y la caña en zacate (GSA).

 

Época en que la mayoría de las personas cosechan al mismo tiempo. También, se celebra el día de muertos y el florecimiento de la flor de cempasuchitl, que es para los muertos. En esta época llega a mi pueblo una gran cantidad de mariposas blancas y las monarcas que provienen del Canadá (CRS).

 

Ha terminado el ciclo del maíz verde y se convertido en rastrojo; la lluvia es muy escasa; la gente agricultora se organiza para ir a cortar el rastrojo; como en enero llueve, no lo podrían moler y eso no es bueno; hay que barbecha a tiempo (YEA).

 

La cosecha llegó y la comercialización del pulque y cerveza empezó. Las mazorcas deben estar secas para ser recogido; si no está secas, están pesadas y, si son guardas húmedas se hecha a perder  el maíz. El maíz recogido sirve, para algunas familias para el autoconsumo; otras lo comercializan a cambio de dinero, para adquirir el vestido y otros alimentos (RRGL).

 

Las víboras vuelven a cambiar de piel. En el cultivo la caña es cortada; si está dulce y amarilla se consume para saciar la sed, sino está de ese color es dejada (en su mayoría) para el fruto (LSS).

 

JAGUAR (ACLOTL): 10 de noviembre – 27 de noviembre

 

Conclusión de la cosechas y, se empieza a cortar el rastrojo, para que se seque bien. Se pastorea a los animales en los pastizales de la milpa porque ya no hacen daño; se inician las primeras heladas (CRS).

 

La gente empieza a desgranar el maíz; se tiene que escoger las semillas para la próxima temporada. Además, los niños que nacen en este mes tienen que poner un nombre de acuerdo al calendario; algunas personas ponen dos nombres; uno de ellos producto de la libertad de pensamiento y el otro, es del calendario gregoriano, para que tengan santo (YEA).

 

Transcurre seco, frío, desolador, desnudo; los felinos buscan el abrazo de Tonatiuh. El gato montés sale de su nido para tomar el Sol de entre las rocas, o los árboles. Jaurías completas de felinos se contemplan al royo del Sol. Los felinos se reproducen y no son víctimas de las pulgas, lo que les permite un excelente desarrollo (VFP).

 

ÁGUILA (CUAUHTLI): 28 de noviembre – 15 de diciembre

 

Las aves emigran del Norte a estas regiones. Por ello es una constante observar en el cielo, el despliegue de alas gavilancillos o titishas (en mazahua) surcando los aires en busca de alimento (VFP).

 

Se empieza a cortar el zacate  para procesarlo y con ello alimentar a los animales en tiempo de sequía. Se deja por dos semanas que la tierra descanse y, luego, se inicie de nuevo el preparado de la tierra para la futura siembra; se realiza el barbecho que significa dar vuelta a la tierra, se deshacen los terrones y se pasa la rastra (RRGL).

 

En esta época se recoge el rastrojo, para hace arcina y lo amontonan para molerlo después. Los que terminan el recojo del rastrojo, barbechan (CRS).

 

La gente comienza a cosechar lo producido, unos tratan realizarla antes del 12 de diciembre, para visitar irse a la villita a visitar a la virgen de Guadalupe. Desde San Felipe salen peregrinaciones con dos días de anticipación (YEA).

 

 

 

 

BUITRE (COZACACUACUHTLI): 16 de diciembre – 02 de enero

 

No pueden ir separados el águila y el buitre, ya que los dos son aves mayores. Por un lado está el águila, señora de los cielos y por el otro  el buitre, limpiador del desorden. En esta época parvadas enorme de tordos (pajarillos negros pequeños) vienen del Norte en busca de alimento (ratas). Las milpas pelonas y secas ven desvanecerse y subir en actos circenses a cientos de pajarillos que vuelan de un lado a otro. Para este entonces el frío y las heladas se sienten en los huesos. En esta temporada la gente teme que el gavilán se lleve o robe a los “pipilos” o güilitos; es que esta ave, desde el cielo vigila en que momento hace presa a un pollito despistado.  Cuando la mama güilas ven a dicho animal comienzan a cloacar (hacer sonidos) anunciando el peligro y el momento para que sus pequeños acudan a esconderse bajo sus alas remeras o sino a que se evite cualquier movimiento, para no ser detectados por el ojo avizor (VFP).

 

El 25 de diciembre, hay personas que llevan a la iglesia,  veladoras, agua, frijoles, mazorcas. Las veladoras las utilizan para que cuando una nube trae granizo o aire la bendicen para que no lleguen. Los frijoles los utilizan para que no le haga falta nada en todo el año (gregoriano). Las mazorcas son las que se escogieron para sembrar; la bendicen para que tengan una buena cosecha en el próximo año (YEA).

 

Se deja en libertad el ganado en la milpa, para que se desahoguen del encierro. Los niños están de vacaciones y salen a pastar animales; además se divierten haciendo papalotes con los xuyes del rastro que quedó en las malparas, para luego echarlas a volar cuando corre aire (CRS).

 

Los zapilotes salen a alimentarse de los animales muertos. Dicen que antes había muchos zapilotes, pero la gente los fue cazando, porque tenían la vaga idea de que los animales traían tragedias a los lugares en que se paraban; además, que se llevaban a los pollos o pipilitos. Estos animales ayudaban a mantener limpio el medio ambiente; no había enfermedades provocadas por infecciones, derivadas de animales muertos, que a veces, la misma gente tiraba al aire libre (RRGL).

 

En la comunidad mazahua “Dios Padre”, el clima en este mes es caluroso y seco durante el día y, de noche hace frío. Este mes se caracteriza por el hielo que cae por las mañanas y que cubre de blanco los campos; seca las plantas y mueren animales por el frío. Aparece el buitre en diciembre; en “Dios Padre” abundan los zapilotes (ACM).

 

MOVIMIENTO (OLLIN): 03 enero – 20 de enero

 

En el mes de enero de toma como el mes del movimiento y lo relaciono con el cuchillo y la lluvia. Corre mucho viento levantando polvo y pequeño tornados. En el pueblo mazahua, el cuchillo se usa como símbolo de defensa ante estos fenómenos de lluvia y tornado. Mi abuela cuando observa un tornado de lluvia o tierra saca el cuchillo de la cocina y dirección del tornado lo mueve en forma horizontal; según ella, para cortar en partes estos fenómenos, para que se desintegren y no dañen los hogares (Alberto Cayetano Marcos: ACM).

 

Que mejor sustantivo para definir el inicio de un nuevo cielo, y es que todo lo que comienza es un proceso de evolución, de cambio. Transformación, surgimiento, renovación. El comienzo de un nuevo periodo exige un nacimiento, lo que genera descontrol, turbulencia, un sismo existencial. Ollín es un símbolo que connota, ya que puede ser desde un sustantivo hasta un adjetivo: Abstracción, terremoto, remolino, tornado, transformación, caos, orden y desorden (VFP).

 

En este periodo, la gente está terminando de cortar y moliendo de zacate. Dicen los abuelos que los primeros doce días del mes significan los doce meses del calendario (gregoriano). De acuerdo al Calendario Azteca se diría que en este mes se reproducen los veinte meses aztecas y, sí llueve en estos días, habrá lluvia durante en el año (YEA).

 

Se empieza a escoger y desgranar la semilla de maíz. La semilla solo puede ser desgranada por gente mayor; generalmente, los hacen las señoras, pero, éstas no deben estar menstruando, porque se dice, que la semilla no sirve. También, se dice que los niños que están mudando de los dientes no deben desgranar el maíz, porque cuando le salgan los nuevos dientes van a salir chuecos (RRGL).

 

En enero – febrero, los tlachiqueros, buscan el maguey que tenga delgado el corazón, para quitárselo. A este procedimiento se lo conoce como “capar” o “cortar” el corazón con un cuchillo y una barreta, para romper o quebrar el quiote. Después de deja reposar unos tres meses (Zaynukari Cruz Cárdenas: ZCC).

 

CUCHILLO (TECPALTL): 21 de enero – 07 de febrero

 

Enero – febrero se busca el maguey que tenga delgado el corazón, para quitárselo. A este procedimiento se lo conoce como “capar” o “cortar” el corazón con un cuchillo y una barreta, para romper o quebrar el quiote. Después de deja reposar unos tres meses, hasta que el maguey presente un color que indica que hay que iniciar el raspado de la cavidad en el corazón, para que brote el agua miel. También, en este mes se selecciona los magueyes (hijuelos) que serán transplantados. Se trabaja con un cuchillo (ZCC).

 

Después de todo movimiento acarreado por Ollín es época de organizar las actividades agrícolas otra vez y por ello, se prepara la tierra, barbechándola, regándola, lo que se convierte en caricias para la Madre Tierra. En los tiempos prehispánicos se representa en el Calendario Azteca, este mes, con un cuchillo porque era la principal herramienta para el “capado” o “corte” del corazón del maguey apto para extraer agua miel; también se usaba el cuchillo para aflojar al tierra y para el transplante de magueyes (hijuelos) (VFP).

 

La gente tiene que barbechar. En febrero se tiene que regar la milpa para sembrar maíz en abril, para cuando empiece a llover el maíz nazca (YEA).

 

Febrero, es el mes en que la semilla se lleva a bendecir; en el día de la Candelaria se realiza una misa, en donde se bendice  las semillas para ser sembradas. Cuando la semilla está preparada, las sembradoras deben estar preparadas y, el resto de la gente, dispuesta a trabajar para tener un buena siembra (RRGL).

 

Los campesinos preparan la tierra de nuevo para volver a sembrar; después que las energías retornan, la tierra está lista. Aproximadamente en este mes, los animales domésticos, como las gallinas y los guajolotes están a punto para ser sacrificados y comidos (LSS).

 

LLUVIA (QUIAHUITL): 08 de febrero – 25 de febrero

 

La gente que tiene milpas espera que llueva dos o tres días, para poder barbechar, ya que son varios meses que no llueve y la tierra está dura (YEA).

 

Este mes se llama loco porque corre aire, llueve y cae nieve en las montañas. Además, es un mes loco porque combina todo lo que pasa en las cuatros estaciones del año. También, por este mes se preparan los terrenos para sembrar y se busca lo que se va a necesitar para la siembra (CRS).

 

En febrero y marzo se comienza a regar. En la tierra sin riego la gente espera las primeras lluvias, para pode barbechar y sembrar el maíz; el cual crecerá gracias a la lluvia que caiga en este periodo. La lluvia viene a ser fuente de vida, ya que al bañar los campos, esta zigzaguea sobre la tierra y permite que la vegetación ilumine en un manto verde el suelo (VFP).

 

Empiezan a caer las primeras lluvias. No son frecuentes, pero ayudan a humedecer la tierra que albergará el cultivo. Como el clima está cambiando, a veces, en este mes no llueve, afectando a los campesinos que no tienen acceso al sistema de riego artificial (LSS).

 

FLOR (XOCHITL): 26 de febrero – 15 de marzo

 

Las hojas de los árboles reverdecen; empiecen a salir flores de los árboles frutales. Este mes es importante ya que de su estado climático dependen los demás meses y se asegura la cosecha. Es el mes para predecir como estará el clima durante el año (LSS).

 

Se lo conoce como febrero loco y marzo otro poco, debido a que estos meses combinan aire, viento, lluvia, remolinos y nieve, que impiden que se alimenten bien los animales; se inicia la siembra del maíz (CRS).

 

La flor es en la cultura mazahua un símbolo de amor, paz y belleza, que se ofrendan al Dios. Se notan las flores del campo, además de pequeñas nubes en el cielo. Según mi abuela, en esta época, cuando el cielo y las nubes de la tarde se pintan de color rojizo, significa que habrá un buen año (ACM).

 

La primavera comienza, las flores embellecen los campos: xochitl (náhuatl), demy (otomí), zacay (maya) transforman el paisaje. La flor ilumina las praderas; la belleza surge de nuevo en un botón a punto a punto de brotar. Rojo, naranja, azul, rosa, verde, amarillo, lila, blanco, todos los colores, toda la belleza de un diseñador sobre el manto verde de la naturaleza (VFP).

 

Las plantas empiezan a florecer, se entra a la primavera. En esta época nace una planta que tiene flores guindas y dura como un mes y medio; el campo está repleto de esta flor. Si uno arranca flores y las machaca un poco y se las echa en un recipiente con agua, sale un aceite y se refleja un arco iris en el agua (YEA):

 

Dato: En el mes FLOR, por lo general, en el Altiplano de México, enfloran los magueyes cuyos corazones no fueron cortados. El tallo de la flor alcanza los tres metros o más de altura; luego, de la flor, brotan un frutos similares a pequeños plátanos que son nutritivos y comestibles.

 

BIBLIOGRAFÍA

 

SÉJORNÉ, Laurette: El Pensamiento Nahuatl Cifrado por los Calendarios. Siglo XXI América Nuestra. México, D.F., 2004, páginas 13 – 36.

 

THOMPSON, John B.: Ideología y Cultura Moderna. Teoría Crítica Social en la Era de la Comunicación de Masas. Universidad Autónoma Metropolitana. México, D.F., 2002

 

VAILLANT, George C.: La Civilización Azteca. Origen, Grandeza y Decadencia. Fondo de la Cultura Económica. México, D.F., 2003, páginas 168 – 170.

 

http://www.es.wikipedia.org/ : Calendario republicano Francés

 

http://www.monografias.com/: El calendario como objeto religioso